Descripción enviada por el equipo del proyecto. Ubicado en la Periferia de México D.F., el Centro Comunitario Chalco es el equipamiento más importante del área, el cual se localiza en el perímetro de la Plaza Central, frente a la Iglesia de la comunidad, lo cual exige al edificio la integración a este espacio público y, como consecuencia, la consolidación de esta pieza urbana conformada de tres elementos: centro comunitario-plaza-iglesia. El Centro Comunitario CHALCO se convierte entonces en un eslabón que teje, unifica, conecta a la comunidad y el espacio público típico de los pequeños poblados de la periferia del Distrito Federal.
Este equipamiento posee un programa social muy variado, desde guardería de niños, centro comunitario, centro de capacitación, lugar de celebraciones locales, por mencionar algunas. Es por eso que este edificio se ha convertido en un equipamiento de gran aceptación para el habitante, el cual ha logrado reconocerlo como un hito importante del lugar.
La edificio en sí es un arreglo de volúmenes regulados por la tipología de Patio Central, la cual morfológicamente se integra a la Plaza Central y crea una progresión de escalas entre esto dos espacios.
Cada uno de los volúmenes que conforman la composición arquitectónica varían su forma dependiendo de la función que alojen: Los salones de clases están representados por volúmenes con la forma típica de la casa de dos aguas; la cafetería por un volumen de planta elíptica; el salón de usos múltiples por un paralelepípedo regular; y la capilla por un volumen elevado en pilotes.
La intención de esta variación volumétrica es la de imprimirle a cada una de las partes un contenido metafórico de la vida diaria de los habitantes del lugar: la casa del árbol, la vivienda unifamiliar, la champa de lámina, el salón de juegos, etc.
La materialidad del proyecto es uno de los aspectos medulares del mismo. Se quiso reconocer los productos y la mano de obra local y mostrarlos con un lenguaje contemporáneo, creando un diálogo entre lo antiguo y lo nuevo. Piezas de cemento, barro, madera y lámina local forman parte de la paleta de materiales que se implementó en el proyecto, todos estos distribuidos e instalados con recursos locales.
Otro de los recursos materiales que merece mención es la piel que recubre los volúmenes que dan hacia el espacio público, la cual está inspirada en los tejidos artesanales. Este recurso se utiliza no sólo como un aspecto que el usuario pueda reconocer al experimentar los espacios, sino como una forma de relacionar a la firma SOLIS COLOMER (guatemalteca), como la cultura local.
El proyecto logra pues, de una manera coherente, la relación entre escalas urbana y el edificio, entre el habitante y el objeto arquitectónico, entre la comunidad y El Centro CHALCO, entre la cultura local y la firma.